En la historia del hombre no ha faltado quien niegue esta afirmación y haya buscado inútilmente el secreto de la eterna juventud. Sin embargo, y aunque los investigadores actuales no tienen aún respuestas concretas, hay cosas que puedes hacer para estirar los años de tu vida y retrasar la vejez.
La Longevidad y el Medio Ambiente.
Que alguien viva más de 100 años es un acontecimiento raro y anecdótico, alrededor de 120 años es noticia mundial y con muchas dudas el récord probablemente lo ostente el granjero nepalés Bir Narayan Chaundahary con 146 años.
Aunque estos son casos aislados, y definitivamente hay un límite en la existencia, potencialmente estamos en capacidad de vivir más años de los que actualmente está estipulado. Las condiciones de vida quizás ejerzan el control más importante y esto explica el hecho de que en países como Estados Unidos o Japón la expectativa de vida es de aproximadamente 77.1 y 80.3 años respectivamente, lo que contrasta con la de Zambia y Mozambique de 37.2 y 37.5 años respectivamente.
Esto condiciona uno de los tres grandes parámetros en cuanto al envejecimiento: el medio ambiente. ¿Cómo influye el medio ambiente en la prolongación de la vida? Probablemente esté directamente asociado a las condiciones de salubridad, los niveles de prevención y atención médica existentes.
Para una Vida más larga una vida Sana
El segundo parámetro es el estilo de vida. Un estilo de vida sano es una muletilla que oímos constantemente pero que pocos siguen rigurosamente. Una dieta balanceada, ejercicios diarios, una permanente actividad intelectual, no usar o abusar de ninguna sustancia como alcohol, drogas o tabaco, son las claves de "la vida sana". Esto no sólo agrega años a la vida sino calidad a los años.
¿Por Qué Envejecemos?
La herencia y los cambios bioquímicos que ocurren en el interior de las células son los factores que dominan el tercer parámetro y son los estudiados ávidamente por investigadores, quienes a su vez han propuesto varias teorías del envejecimiento.
Estas teorías podemos agruparlas en dos conceptos: El primero llamado teoría de "las células programadas" dice que las células poseen un reloj biológico, determinado aparentemente por algunos genes que inducen a las células a realizar un "suicidio" en un momento determinado; una variante de esta teoría establece que el control se realiza a través de ciertas sustancias hormonales.
La segunda teoría, "la de los errores celulares" es la que dice que las células con el tiempo van acumulando sustancias tóxicas como los radicales libres que van deteriorando progresivamente su función. Algunos exponen que son los "errores" en la construcción de proteínas y otros elementos celulares los que llevan al envejecimiento, explicado quizá por un cambio en el material genético por acumulación de mutaciones en el tiempo.
Por el momento podemos concluir que no hay una respuesta absoluta, sin embargo podemos utilizar aunque empíricamente, este conocimiento.
Primero, aunque las expectativas de vida pudieran no ser una razón justificable para migrar, es cierto que procurar un medio ambiente que incluya agua potable, electricidad, alcantarillado, seguridad, estabilidad económica, medidas de salud preventivas y una atención médica adecuada permitirá tener más opción de una vida prolongada. Y segundo, una vida sana es clave para mejorar la calidad de vida. Seguir esos consejos es imprescindible.
Por el momento podemos concluir que no hay una respuesta absoluta, sin embargo podemos utilizar aunque empíricamente, este conocimiento.
Primero, aunque las expectativas de vida pudieran no ser una razón justificable para migrar, es cierto que procurar un medio ambiente que incluya agua potable, electricidad, alcantarillado, seguridad, estabilidad económica, medidas de salud preventivas y una atención médica adecuada permitirá tener más opción de una vida prolongada. Y segundo, una vida sana es clave para mejorar la calidad de vida. Seguir esos consejos es imprescindible.
Los Secretos contra el Envejecimiento
Una teoría científica puede ser comprobada, cambiada o refutada, sin embargo, tomando en cuenta lo que tenemos hasta ahora podemos exponer algunos secretos contra el envejecimiento.
Antioxidantes. Las vitaminas A (Beta-caroteno), C y E son conocidos antioxidantes que ayudan a controlar los radicales libres en las células. Los beta-carotenos los podemos encontrar en las zanahorias, mangos, melón, melocotón, espinacas. La vitamina C se encuentra principalmente en frutas cítricas como el limón y naranja, el kiwi, grosellas, coliflor, fresas, pimientos. La vitamina E se encuentra principalmente en el aguacate, boniato, espinacas y espárragos.
Se ha comprobado que consumir estas sustancias reduce el nivel de radicales libres y aumentan el promedio de vida en animales de laboratorio.
Control de la glucosa y de los productos finales de la glicosilación. El metabolismo de la glucosa juega un papel fundamental en el envejecimiento. De hecho, se podría decir que la diabetes es un modelo de envejecimiento rápido. El control estricto de la glucosa y especialmente de los llamados productos finales de la glicosilación, que hasta ahora no se miden rutinariamente, podría aportar unos años a la vida.
El Secreto: Consumir la Mínima Cantidad necesaria de Azúcares en la Dieta Diaria.
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La luz solar. La teoría que apunta a los daños del material genético (incluyendo la enzima de la inmortalidad: la telomerasa) utiliza muchas veces el ejemplo de la piel expuesta a los rayos solares. La luz ultravioleta es uno de los elementos que más daña el DNA de las células. La piel de las personas expuestas a la luz solar por mucho tiempo sufren los mismos cambios que los producidos por el tiempo.
El secreto: evitar a toda costa la exposición prolongada a la luz solar. Se recomienda el uso de gafas, sombreros, sombrillas o cualquier otra medida de protección además de, por supuesto, el uso de protectores solares.
Los micronutrientes. Los minerales están cada día más asociados con la función de la mitocondria, que es el organelo celular en donde se lleva cabo la "respiración celular" y la formación de las unidades de energía (ATP). Los minerales juegan un papel crucial en la función mitocondrial, son entre otros el zinc, magnesio, fósforo y el selenio (un excelente antioxidante además).
El secreto: agregar un suplemento de minerales a la dieta.
El estrés. La exposición a un estrés psicológico, a sustancias tóxicas y al calor hace que el cuerpo produzca unas proteínas especiales que ayudan a eliminar estas sustancias tóxicas del cuerpo. Sin embargo, con el tiempo la producción de éstas declina, por lo que se sugiere disminuir la exposición a esos elementos (estrés, tóxicos y calor).
El uso de técnicas como el yoga o el deporte para disminuir los niveles de estrés, el consumo de alimentos naturales y evitar los ambientes excesivamente calientes son los secretos en este punto.
Las hormonas. El papel de la hormona de crecimiento para detener o incluso mejorar los signos de envejecimiento fue comprobado en un estudio realizado en hombres mayores de 60 años. Sin duda, la hormona de crecimiento, la melatonina, la DHEA o (DEA) y la testosterona juegan un papel muy importante en el envejecimiento. Muchos puntos siguen sin aclararse, pero se podría apostar a su consumo bajo la supervisión y consentimiento de su médico.
El control medico periódico. La activación continua o prolongada del sistema inmunitario se esgrime como otro factor para la declinación de las funciones celulares. Ante este punto se recomienda un control médico periódico que detecte y trate enfermedades infecciosas o tumorales para preservar nuestro sistema inmune.
Una teoría científica puede ser comprobada, cambiada o refutada, sin embargo, tomando en cuenta lo que tenemos hasta ahora podemos exponer algunos secretos contra el envejecimiento.
Antioxidantes. Las vitaminas A (Beta-caroteno), C y E son conocidos antioxidantes que ayudan a controlar los radicales libres en las células. Los beta-carotenos los podemos encontrar en las zanahorias, mangos, melón, melocotón, espinacas. La vitamina C se encuentra principalmente en frutas cítricas como el limón y naranja, el kiwi, grosellas, coliflor, fresas, pimientos. La vitamina E se encuentra principalmente en el aguacate, boniato, espinacas y espárragos.
Se ha comprobado que consumir estas sustancias reduce el nivel de radicales libres y aumentan el promedio de vida en animales de laboratorio.
Control de la glucosa y de los productos finales de la glicosilación. El metabolismo de la glucosa juega un papel fundamental en el envejecimiento. De hecho, se podría decir que la diabetes es un modelo de envejecimiento rápido. El control estricto de la glucosa y especialmente de los llamados productos finales de la glicosilación, que hasta ahora no se miden rutinariamente, podría aportar unos años a la vida.
El Secreto: Consumir la Mínima Cantidad necesaria de Azúcares en la Dieta Diaria.
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La luz solar. La teoría que apunta a los daños del material genético (incluyendo la enzima de la inmortalidad: la telomerasa) utiliza muchas veces el ejemplo de la piel expuesta a los rayos solares. La luz ultravioleta es uno de los elementos que más daña el DNA de las células. La piel de las personas expuestas a la luz solar por mucho tiempo sufren los mismos cambios que los producidos por el tiempo.
El secreto: evitar a toda costa la exposición prolongada a la luz solar. Se recomienda el uso de gafas, sombreros, sombrillas o cualquier otra medida de protección además de, por supuesto, el uso de protectores solares.
Los micronutrientes. Los minerales están cada día más asociados con la función de la mitocondria, que es el organelo celular en donde se lleva cabo la "respiración celular" y la formación de las unidades de energía (ATP). Los minerales juegan un papel crucial en la función mitocondrial, son entre otros el zinc, magnesio, fósforo y el selenio (un excelente antioxidante además).
El secreto: agregar un suplemento de minerales a la dieta.
El estrés. La exposición a un estrés psicológico, a sustancias tóxicas y al calor hace que el cuerpo produzca unas proteínas especiales que ayudan a eliminar estas sustancias tóxicas del cuerpo. Sin embargo, con el tiempo la producción de éstas declina, por lo que se sugiere disminuir la exposición a esos elementos (estrés, tóxicos y calor).
El uso de técnicas como el yoga o el deporte para disminuir los niveles de estrés, el consumo de alimentos naturales y evitar los ambientes excesivamente calientes son los secretos en este punto.
Las hormonas. El papel de la hormona de crecimiento para detener o incluso mejorar los signos de envejecimiento fue comprobado en un estudio realizado en hombres mayores de 60 años. Sin duda, la hormona de crecimiento, la melatonina, la DHEA o (DEA) y la testosterona juegan un papel muy importante en el envejecimiento. Muchos puntos siguen sin aclararse, pero se podría apostar a su consumo bajo la supervisión y consentimiento de su médico.
El control medico periódico. La activación continua o prolongada del sistema inmunitario se esgrime como otro factor para la declinación de las funciones celulares. Ante este punto se recomienda un control médico periódico que detecte y trate enfermedades infecciosas o tumorales para preservar nuestro sistema inmune.